Jazzazza se supera una vez más
y yo no estaré allí.
La vida me improvisa
y he de irme con la música a otra parte.
Los gajes del oficio,
que vienen con la barra bajo el brazo.
Vosotros, bienaventurados,
que aún estáis a tiempo de sacar una entrada,
poned, al menos, una vela por mí.