martes, 25 de octubre de 2011

Cotijazz en la Calle



[Hace un par de días envié el siguiente artículo al diario La Opinión de Murcia, con la doble intención de ensalzar el Cotijazz y abogar una vez más por nuestro malogrado festival Jazz en la Calle. Aún no me han dado acuse de recibo, así que ignoro si les habrá llegado y más aún si será o no publicado "antes del jueves", tal y como me permití pedirles. Confiemos en que sí. Lo cuelgo aquí en tanto se despejan esas dudas.]

* * *

A vueltas con el jazzDel 27 al 30 de octubre se celebra en Las Torres de Cotillas
la segunda edición del festival Cotijazz

Decíamos ayer que el jazz dejó hace mucho tiempo de ser (si es que alguna vez lo fue) un género minoritario, y mucho menos elitista, en la misma o mayor medida en que la música clásica tampoco lo es; que el jazz es una fuente de fuentes y una música culta en donde la tradición popular siempre ha estado presente; que, desde sus orígenes hace poco más de un siglo, ha venido propagándose por el mundo a un ritmo y una velocidad vertiginosos; y también que el jazz ha dado a la Historia de la Música a muchos de sus más ilustres intérpretes y compositores. Decíamos asimismo que el jazz convoca a un público heterogéneo, fervoroso y cortés. Y aducíamos estas y otras muchas evidencias a fin de señalar como un error de gran calibre la silenciosa supresión del XXXI Festival Internacional de Murcia, a raíz de la cual los atribulados músicos y aficionados murcianos no podemos evitar poner cara de circunstancia y sentir vergüenza ajena al comprobar cómo otros municipios, cuyos festivales nacieron a reflujo del nuestro, continúan apostando fuerte por el jazz y adaptándose a estos tiempos de crisis con responsabilidad y clarividencia, para mayor gloria de sus ayuntamientos, de sus gestores culturales y, en general, de la imagen de nuestra oferta cultural como región.

Una prueba más del arraigo y el alcance del jazz en nuestra comunidad fue el nacimiento, durante la primavera de 2010, del Festival Internacional de Jazz de Las Torres de Cotillas, oportunamente denominado Cotijazz, que este año celebra su segunda edición y que encierra en su concepto y organización muchas semejanzas con el festival que en sus inicios aquí en Murcia denominábamos Jazz en la Calle. El Cotijazz II, que va a desarrollarse del 27 al 30 de este mes, ha sido organizado una vez más por los torreños Curro García y Cristóbal Vicente a través de la Asociación Musical CLAJ, aunque ambos son también miembros de la junta directiva de la Asociación Zarangojazz y ésta aparece en los créditos del Cotijazz como colaboradora. Desconozco la cantidad exacta que el Ayuntamiento de Las Torres de Cotillas ha aportado para llevar a cabo el festival, pero me consta que ha sido realmente minúscula, y así lo ha reconocido el propio alcalde del municipio en su presentación a los medios. Pero lo importante es que la corporación ha apoyado la iniciativa desde un principio y ha cedido los escenarios y espacios públicos necesarios para llevarla a cabo. Por su parte, los organizadores han conseguido pergeñar un programa sumamente digno gracias a la colaboración cuasi altruista de la totalidad de los músicos y grupos participantes (lo que vuelve a decir mucho en favor de los músicos de jazz, que han antepuesto su solidaridad y su compromiso a sus, por otra parte, legítimos intereses profesionales). Por todo ello, gracias, enhorabuena, mucho éxito y ojalá que el año próximo veamos a este casi recién nacido Cotijazz crecido, fortalecido y yendo a más.

Pero digo yo: ¿no podríamos intentar un esfuerzo similar en Murcia para que nuestro longevo festival de jazz no desaparezca?

Un año sin Julio Muñoz

[Obituario publicado hoy en la edición impresa del Diario La Opinión de Murcia bajo el título 'Un año sin un emblemático bajista de ...